A estas alturas, todos hemos escuchado aquello de que «hay que trabajar en equipo». Desde luego, tiene mucha importancia, pero siempre que se entienda correcta y razonablemente.

Permíteme introducir el tema a nivel espiritual, y luego verás con claridad por qué era necesario… Tengamos en cuenta que en el universo todo está unido a todo. Como ya hemos abordado en otras entradas, esto no se puede conocer mediante la razón, pero sí mediante la experiencia directa (y la meditación es el camino para lograrlo). Sin embargo, nuestro compañero de viaje, el ego, se aprovecha de la razón y de nuestras capacidades mentales subjetivas para hacernos ver el mundo fragmentado en pedazos. Uno de esos trozos somos nosotros. El ego fabrica para nosotros una idea de entidad separada del resto de «trozos». Y lo más curioso de todo: ¡le hacemos caso! Y le hacemos caso porque no nos preocupamos ni lo más mínimo del ego. Si lo hiciéramos, nos daríamos cuenta de lo que hace, y entonces… ¡a buena hora le haríamos caso! Ese «darse cuenta» se puede desarrollar mediante la práctica del mindfulness.

Entonces, en resumen, si todo está unido a todo, ¿qué va a haber en el mundo más natural que trabajar en equipo? ¡De hecho, no existe otra posibilidad! Cualquier logro que cualquier persona alcanza, jamás se consigue en solitario. De forma directa o indirecta, intervienen otras personas. ¡No le des más vueltas! Si no lo crees, entonces tienes la prueba inequívoca de que estás haciendo caso al ego.

Una vez dicho esto, es cierto que trabajar en equipo es lo más natural del mundo, y funcionaría a la perfección si nadie estuviera controlado por su ego. Sin embargo, mira como está el mundo…  No tengo la menor duda de que el ser humano llegará un día, en su evolución espiritual, a liberarse del ego, pero es obvio que estamos muy lejos de ello todavía. Así que, mientras existan tantas personas dominadas por su ego, será muy difícil encontrar equipos donde el ego no esté presente. Vamos, que los equipos que puedas formar en este mundo material no van a ser perfectos, y el ego se va a dejar ver de algún modo.

¿Significa eso que es imposible trabajar bien en equipo hoy día? ¡Para nada! Si formas parte de un equipo donde las personas sean conscientes de sus egos y  sepan dominarlos, entonces tu equipo funcionará. Y, sin ninguna duda, lograrás cosas que son imposibles en solitario. Pruébalo, y tú mism@ lo verás.

Ahora bien, en muchos casos no es posible formar esos equipos tan ideales. Puede que te encuentres, por unas circunstancias u otras, dentro de un equipo donde sus componentes están movidos por intereses egoístas. Solo buscan recibir, pero no piensan en aportar nada al equipo. Seguro que ya sabes a lo que me refiero. En esos casos, sin duda, lo mejor es salir del equipo y formar otro, o incluso empezar en solitario. Claro, ya lo sé, en muchas ocasiones eso no es sencillo (por ejemplo, a veces se nos obliga a ser parte de un equipo sin pedir nuestra opinión). Cada caso es un mundo, y solo tú sabrás cómo tratarlo. Mi único mensaje es que trabajar en un buen equipo merece la pena y se consigue más que en solitario. Pero, por otro lado, si un equipo está marcado por el ego, es mejor buscar otras vías, cada cual haciendo lo que pueda, como pueda, y cuando pueda, con paciencia y sin dar nada por imposible.

Y, ¿existe vida más allá del equipo? ¿Hay alguna «dimensión superior»? La respuesta es afirmativa. Se trata del trabajo en red. Hay cosas que un equipo no puede lograr fácilmente, hay que admitirlo. Sin embargo, si se une a otros equipos, personas, expertos, etc., se pueden lograr cosas que el equipo solo no podría alcanzar.

¿Cómo se trabaja en red? ¿Qué pasos hay que dar para comenzar? ¿Qué aspectos se debe tener en cuenta? Para responder a estas y otras cuestiones, te invito a leer este artículo práctico en el que comparto contigo diversos consejos para trabajar en red.

En el libro Atrévete a ser un líder encontrarás mucha más información sobre el trabajo en red. Además, aprenderás que todo ser humano puede convertirse en un líder consciente (de los que vienen a servir y no a servirse), y no hablo de empresas ni de política, sino de cualquier ámbito de la vida. Y lo más importante, aprenderás cómo hacerlo, paso a paso.